Las hormigas carpinteras, también denominadas madereras, son conocidas por causar daños en diferentes estructuras de madera. Su presencia en los hogares también es problemática, no solo los daños estructurales ocasionados, sino también, porque éstas buscan comida en las cocinas, comedores, etc. Las hormigas carpinteras son omnívoras y se alimentan tanto de materia vegetal como de animal.
Son insectos sociales con una organización compleja que gira alrededor de la reina. Para mantener al hormiguero, las hormigas carpinteras obreras deben cubrir, a veces, grandes distancias desde su nido para obtener el alimento. Construyen sus nidos en la madera pero, no la comen; la perforan sacando virutas finas que parecen aserrín, siendo este hecho el que delata la presencia de estos insectos. A medida que la colonia crece, pudiendo alcanzar miles de miembros, las obreras agrandan gradualmente su nido, causando serios daños internos en la madera.
Las hormigas carpinteras están activas todo el año por las condiciones climáticas favorables que encuentran dentro de los hogares. Se han encontrado nidos, incluso detrás de libros almacenados en las bibliotecas, y en el interior de los paneles de aislamiento de espuma de poliestireno. En el exterior, pueden alojarse en troncos, ramas de los árboles, maderas secas en el suelo, así como también en zonas enfermas de árboles.